Por ahí denunciaron a una muchachona que me roba los posts. Al principio me sentí halagada, hasta quise establecer contacto con ella. Es que incluso se toma la molestia de editar los textos: por ejemplo, un post sobre AMLO lo alteró pa' que se adaptara a la situación actual desafuero-siempre-no. Caramba, eso es dedicación.
Además, wow, pone en sus intereses "trastornos de la alimentación". Podríamos hablar del tema por horas, quizá alguien al fin comprendiera mis extraños rituales con la comida, tal vez hasta lograra convencerla del equilibrio nutricional que las tortas de queso blanco representan.
Bah, pero luego me puse a navegar por sus páginas y las de sus amiguitas, y están tan pa' llorar que mejor la balconeo sin pudor:
La plagiaria estrella es
Moly y
altaramia.blogspot.com su blog. La dirección hace referencia al rimbombante orgullo que siente por su condición de bulímica. Tiene una
página donde linkea a otros sitios donde una caterva de "mías" discute las formas más glamourosas de guacarear. Este
foro es una hermosa galería de faltas de ortografía. Ya de ahí pueden asomarse tantito a las páginas de las otras chicas, cuyas personalidades fluctúan entre la
darquetez y el culto a la muñecas Bratz.
Ahora bien, cabe aclarar algunas cosas. De ningún modo creo que padecer bulimia, o cualquier otro trastorno alimenticio, sea motivo de burla. Para nada, yo soy la primera con la cabeza retorcida a la hora de comer, y sé que no ser "delgada natural" puede resultar lo más frustrante del cosmos. También me caga la desinformación general, esa que me estigmatiza como "la que come preocupantemente raro". Y todo porque leyeron en Marie Claire o vieron en un emotivo reportaje en el noticiario de Lolita Ayala que si las lindas señoritas dejan de comer quesadillas grasientas y bajan cinco kilos de sopetón hay que poner el grito en el cielo e ingresarlas a una granja-para-trastornadas-de-la-alimentación (además eso ni ha de existir en México, las clínicas de ese tipo son meras gringadas). Sí, le tengo un pavor mortal a las grasas saturadas, el azúcar me provoca pesadillas, antes me como
una cabeza olmeca que un
pambazo demoniaco. Pero nada de eso me hace una anoréxica perdida, gracias Lolita por tu preocupación.
Sí, sí, ya sé de lo que me pierdo, sí, sí, ya sé que los placeres de la vida y la verga de ocho patas, pero por favor no molesten: no me voy a comer esos tacos de carnitas. Gracias.
Lo que me parece francamente ridículo es rendirle culto a una enfermedad mental, como si se tratara de Alejandro Jodorowsky o LuisMiRey. Quien se tome la molestia de descifrar el galimatías de incorrecciones de las que escriben en el
foro, notarán que para ellas padecer bulimia es como pertenecer a un exclusivo club de fans. Una lógica similar a la que expuse en el post titulado
Celos. ¡En serio! Es algo muy curioso y que ya había visto antes: estas chicas pro-ana y/o pro-mía creen que
sólo ellas (las que llegaron
antes) tienen el derecho de guacarear o dejar de comer, las demás son guanabís, son pura pose. A las "nuevas" las tratan con la punta del pie,
¡miren!("¡César Costa es
mío!")
La próxima vez que me enferme de gripe, voy a dejar BIEN CLARO que a MÍ me dio primero, y que todos los demás son unos IMITADORES BARATOS.
¡Ese virus es mío
, yo lo descubrí primero! Ustedes ni siquiera saben el verdadero significado de estar resfriado! ¡Bah!