Plaqueta y ya

Antes "Verde Plaqueta" (aunque todavía es verde); antes antes "Documentando mi pasado, pa' que haya constancia" (aunque todavía lo documento, y todavía es pa' que conste).

domingo, octubre 30, 2005

No conseguí los tresmildólares, pero sí un vestido de novia

Y estuve cortándolo por horas con unas tijeras que no tenían filo (ahora tengo dos ampollas en la mano derecha). Lo mejor de mi disfraz fue, obviamente, el novio (en cuyo peinado tuve el honor de participar).

La fiesta fue una gran fiesta, y además, se acabó el horario de verano. Alegría y celebración en tiempo real por la hora de vida devuelta. La mejor forma de viajar en el tiempo es muy borracha y bailando-no-bailando-más-bien-bailoteando Qué bellos son tus senos de hombre con alguien tan maravillosamente inepto dancísticamente como tú (o sea yo, no tú ni él, pero él sí, ¿eh?).

Postearía fotos, pero ps no tengo. ¿Quién sí tiene? Ya mándenmelas.

viernes, octubre 28, 2005

Necesito otros tresmildólares y un vestido de novia

Clara está haciendo su tesis sobre compradores compulsivos. Me entrevistó a mí, porque me llamo Plaqueta y tengo un problema.

Pero ya no.

En en buen tiempo no habrá más discos de ocho pesos. Hay que solidarizarse y ahorrar ahorrar ahorrar. Juro que sólo gastaré en lo necesario y... y en un vestido de novia, si lo encuentro a tiempo. Porque ese sí es MUY necesario. ¡No tengo disfraz! Emergencia, muerte, destrucción.

Mañana: todos a esta fiesta.

martes, octubre 25, 2005

Soñé que hacía un post maravilloso

De verdad, pensaba "ya estuvo, ya posteé esta chingonería, puedo regresar a mis deberes escolares tranquilamente".

Desperté y: no había post.

Ahora no puedo regresar contenta a hacer mi tarea, porque este post está bien feo.

También soñé que encontraba un diminuto libro azul adentro de un frasco de Vick Vaporub. Le medio desembarraba el mentol, y lo abría esperando encontrar algo sumamente cabrón, pero no, estaba bien aburrido. Era una especie de diccionario hebreo-ruso para turistas desubicados. Toing.

Ya, ya, mi tarea.

martes, octubre 18, 2005

Ya no estoy tan enojada

Porque me voy a la más hermosísima y turística ciudad del mundo a recibir mi premio:

...

Durango

...

Ahí donde los alacranes y... los alacranes.

Lo único que sé de Durango (además de lo de los alacranes) es que aquí hay una calle que se llama así (oh), y está el Palacio de Hierro y hay muchos puestos de tortas y una foto de Federico Döring que me da mucho miedo.

Buscando en Google encontré valiosísimas imágenes como:




¡El traje típico!
(si quiero vestirme así, no aceptaré imitaciones ni ropa de otros estados)

Y:



¡La fauna endémica!
(qué preciosas botas me voy a comprar)


Sentimientos encontrados, no mamadas

Me acabo de ganar unos cuantos buenos dineros en un concurso.

Y sí, soy una orgullosa-arrogante-del-mal, pero me siento de-la-chingada, echo espuma por la boca, MUERO de coraje. ¡Es el pinche segundo, SEGUNDO lugar! No mamen, yo merecía el primero. ¿Dónde está mi honor, dónde, DÓNDE?

(ni sé con qué me ganaron, pero no mamen, seguramente yo fui la mejor, grgggrgrgrgrgr)

No insistan, no hay chelas gratis para todos.

Dos experiencias cercanas a la muerte en menos de 30 segundos

En mi pueblo le están sacando las tripas a Emiliano Zapata (la calle). Parece que ya van a poner drenaje. El progreso, oh, gracias señor delegado.

Entonces ahí están todas las tripas-tierra por fuera, y un vacío en medio. Yo, experta en resbalar y caer y accidentarme, ps obviamente me rebalé y caí y casi casi que me accidenté. Pero no, me agarré de una roca, y ya no me fui de cabeza al abismo. Tan hábil, yo.

Segundos después, una excavadora Caterpillar estuvo a punto de arrancarme la cabeza.

Explicación científica de mi salvación: San Andrés, santo patrono del pueblo, me cubrió con su mano divina.

Próximamente: peda-peregrinación para agradecer el milagro recibido.

Yo quiero poner un Instituto de Belleza

Sólo para bautizarlo así:



Esta foto ya es bien prehispánica, de cuando fui a Michoacán, hace como año y medio. PERO la rescato como homenaje-invitación al blog de Gonzalo, específicamente al post donde cuenta de su viaje a Oaxaca. Divertidísimo.

domingo, octubre 16, 2005

Pues yo también tengo un estéreo, fíjensennn

En estos momentos:

Los vecinos pobres de la casa de tabicón-peludo-techo-de-lámina-cajas-de-cartón-perros- niños-chorreados tienen sintonizada La Z. La escuchan a todo volumen.

Los clasemedieros de la casa de tabique rojo y decoraciones de Wal Mart tienen un disco de Alejandro Fernández. Lo escuchan a todo volumen.

Los chairos de la cabaña de madera (de verdad es una cabaña y es de madera, cuenta la leyenda que se la trajeron desde Michoacán y la armaron aquí) han decidido poner una finísima selección de dub (eufemismo para reggae-digitalizado-pendejón-y-de-hueva). Lo escuchan, por supuesto, a todo volumen.

Es una mezcla espantosa que confluye en mi casa en mi cuarto en mis orejas.

PERO yo tengo un nuevo paquetotototote de discos de ocho pesos para olvidarme de mis vecinos, groseros desconsiderados. Y ni siquiera hace falta que los ponga a todo volumen, nomás con que se cubra aquel ruidero, ps ya con eso.

Descubrimiento musical del día:



Laura Veirs. Es de esas mujeres que tienen una guitarra y cantan. Está bien chido el disco. Opino yo, pues.

* * *

Actualización:

Otro gran GRAN descubrimiento (aunque ya medio sabía, pero ahora lo corroboré y):


The Decemberists. Qué hermosura. Ante este disco sólo he de decir: oh.

martes, octubre 11, 2005

"Demuestran valor científico de la llamada limpieza de chacras"

Oh, sí, gran noticia publicada por La Jornada, traducida del Independent. Fiuf, qué alivio, por un momento pensé que sólo se trataba un montón de charlatanes haciendo bomborolón.

Chale.

Creo que empezaré a leer un diario que no sea tan descaradamente chairo.

lunes, octubre 10, 2005

El no-break que me compré ayer hace mucho ruido

Y ya es noche-noche (día-día) y me da miedo y me da espantos.

La última de Word

Primero dice que bloguear ni madres, que bloQuear, dice, dice. Pero eso lo puedo entender, Word es inculto como maestra de escuela.

Lo escandaloso es que corrige: Luis no, que Luís, así, con acento.

Lo siento por todos los Luises del mundo, Word no los acepta ni respeta como son.

Viva la piratería

El disco de los Dresden Dolls es maravilloso. Pero el mío es mejor porque costó 8 pesos. (Por cierto, vayan a su página, está rechida).

Al parecer, los budistas no malearon a Leonard Cohen allá en la montaña, porque el Dear Heather es una belleza, qué discazo. Pero el mío es mejor porque costó 8 pesos.

El Murder Ballads de Nick Cave me hace llorar de alegría, y todavía más porque costó 8 pesos.

Y así con los otros 20 discos que me compré ayer. Y así con los 25 de la semana antepasada. Y así.

El precio bajo es lo de hoy, el valor agregado de moda.

domingo, octubre 09, 2005

Por eso ya ni a los chairos les gusta ir a Coyoacán

El árbol de los chicles ya no tiene chicles. Qué enormísima mamada. Se los quitaron, así. Me indigné tanto. Primero creí que fue una medida de "limpieza" de los tarados de la delegación. Pero hoy en la revista df, donde también se preocuparon por hablar de la tragedia, leí que ps había sido un ciudadano común, un güey barbudo con una espátula, él solito. Que se tardó dos días. ¿Por qué nadie lo detuvo? No puedo imaginarme a los encargados de los establecimientos de la cuadra presenciando el crimen, así nada más, sin tomar cartas en el asunto, ¿en qué pinche cabeza cabe no indignarse y salir y detenerlo a punta de chingadazos por andar destruyendo las bellezas de la nación? Peor que pisar las florecitas de Reforma, peor que arrancarle los pedazos al Polyforum, peor que pintarle ojos rojos y seis-seis-seises a los anunciones de Santiago Creel del periférico (¡el que lo hizo es un artista!).

Ya no hay moral.

miércoles, octubre 05, 2005

Ps ni quien quiera ir a su pinche país

Planeábamos viajar a Niuyor en navidad, pero no hay citas para visa hasta enero. Pinches, pinches. Chidoguán tenía razón: nada más te dan prioridad si se te está muriendo un familiar. Y yo que tuve una tía agonizante, pero ps ya agonizó y ya expiró y ya no hay tía, ya pa' qué.

Pero no importa. México nos ofrece hermosos atractivos turísticos. ¿Quién quiere ir a verle el sope a la Estatua de la Libertad, cuando puede verle el sope al mismísimo JoséMaríaMorelosyPavón, semi libertador de la patria?


Amiguito, encuentra las cinco diferencias, después escribe un ensayo sobre la gloriosa isla de Janitzio y la guapura de Morelos -puntos extra si hablas de su coquetísimo paliacate.

Lo tenemos todo, no necesitamos salir del país ni pasar más frío del necesario. ¿Ps qué? También en Perisur ponen un arbolote de navidad, ¿no? ¿No?

Bueno, ya, el próximo año.

martes, octubre 04, 2005

Bueno, ya

Algunos chicos son más grandes que otros.

***

Actualización súper tardía, pensada pasadito septiembre de 2006 pero escrita todavía meses después:

Reitero la frase. Pero pensando exactamente lo contrario de lo que creía en el momento en que la escribí.

Este el peor post, el más malo y el más ajeno (onda estar poseída por un demoño maloso) que he hecho en mi historia como bloguera. ¿Pero qué podía esperarse de una campesina ignorante como yo, impresionada con unas cuentas de vidrio, mucho verbo y arrogancia?

Nunca podré recuperar lo perdido, ni lo merezco. Pero está bien, la cosa fue muy útil y ni siquiera me arrepiento del asunto como-un-todo (pero sí de la parte de mi maldad, mucho mucho, nunca me perdonaré haber traicionado de esa forma, qué puerquez, qué marranez, qué asco me doy cuando me acuerdo) porque aprendí un chingo y, ps sí, pendejada sería negarlo, tuvo sus momentos muy muy muy chidos. Me sirvió además para otras cosas, como de una buena vez reafirmarme como persona ("reafirmar" en todas sus conjugaciones suena a senos aguados, juar), comprobar que el sentido de todos los insultos es completamente relativo (ejemplo: si alguien que consideras un pendejo llega y te dice "eres un pendejo", no harás otra cosa que rodar por el piso de risa), y comprender ese refrán de la astilla en el ojo ajeno y la viga en el propio (brbrbrbr, me sigue dando repelús pensar en eso, pero por lo menos ya lo entiendo).
Y todo me recuerda a Alice porque ni el arroz ni el mango eran para mí, y ahora, ahora soy feliz. Y camino por la calle y me detengo y pienso que toda la mierda es tiempo pasado y digo: me gusta mi vida. Es la vida que siempre soñé.